Artwork

>> domingo, 2 de agosto de 2009

Me he pasado un buen rato intentando comprender la portada del nuevo disco. ¿Se está inyectando tinta/arte? ¿Se ha hecho las marcas de "work" con la aguja? ¿El arte se inyecta? O yo no pienso bien con el calor, o he aquí una pequeña pega.

La cosa es la siguiente (bastante obvia, además): pese a haberme dicho que el disco saldría a primeros de este año, que estamos en agosto y se espera su salida para el 1 de Septiembre, sí, pese a eso y después de dos años, The Used vuelve al ataque.

Decir que estaba muy ansiosa por la llegada de este nuevo disco desde la venta del anterior sería mentir, ya que conocí el grupo prácticamente el año pasado. Que después la imagen de la portada se asemejara bastante a mí chutándome todos sus discos de golpe es otra cosa.
Porque los conocía de antes, sí, los conocía, gracias a una fatídica coincidencia con esa versión que hicieron de Under Pressure junto a My Chemical Romance en una muy pésima calidad de sonido y tras uno de mis adorados reencuentros con David Bowie. Mala suerte para ambos: para mí porque tardé más tiempo en conocerlos y para ellos porque se quedaron sin una fan menos -y también, una depravada menos en el mercado de "Violemos a Jeph"- Ejem.

Pero han vuelto, con una moderada paciencia por mi parte a pesar de haberse ganado mis oídos el día que llegaron a mi reproductor canciones como Pretty Handsome Awkward, The Bird and the Worm o la conmovedora Smother Me.

Este regreso viene de la mano de once nuevas canciones, cuyo single de presentación se llama Blood on my hands -Lur corre y se esconde debajo de la cama, mirando el ordenador con cautela. ¿Qué rollo emo es éste? Bert, no me jodas. El pájaro y el gusano tiene un pase, pero esto de sutil tiene poco ya.

Viendo el videoclip (aquí abajo):



se me vinieron a la cabeza varias cosas: 1) que si han tardado más de lo que me dijeron en sacar el disco, fue para que Bert practicara más su cara de psicópata a lo Jack Nicholson, 2) para que a Dan le creciera mucho más el pelo hasta que no se le ve detrás de él, y 3) al margen de los meses que se han pegado de más, con esta primera canción y este primer video de presentación, me pongo en modo Bruce Lee con las manos en posición defensiva y me pregunto: ¿qué coño...?

Temiéndome que el disco siga esa misma temática, mi ceja se alza hasta que casi se mezcla con mi pelo y pienso seriamente en si estoy vacunada para esto.

Por suerte, gracias a la revista Kerrang!, a mi dominio del inglés, a su chivatazo del nombre de las demás canciones y a que en Internet está todo, y cuando digo todo, es ¡todo!, escucho el resto de canciones y estudio algunas letras para ver que Blood on my hands no es más que un susto. Me gusta la canción, y mucho, lo admito... pero sólo si es una. No quiero salir con ganas de matar a alguien cuando termine de escuchar las diez canciones restantes.

Así que he aquí mi veredicto: me encanta. Manteniéndose siempre en su estilo, han sabido conseguir, a diferencia de lo que ocurriera con Green Day, que uno no tenga la sensación de estar escuchando un plagio de algún disco anterior con letras distintas. Este disco está mucho más desvinculado de lo mental y lo psicológico para dar la bienvenida a lo sentimental de una manera concienzuda. No pienso especular mucho tampoco sobre a qué se deberá eso. Yo qué coño sé xD


En definitiva: Bert, Quinn, Jeph, Dan... enhorabuena. Habéis creado un nuevo disco en el que incluso se me han puesto los pelos de punta con canciones como la de
Kissing you Goodbye. Y eso ya, en una perra del infierno como yo, merece una ovación. Felicidades. Fin de la transmisión xDD

1 huellas:

Iria 4 de agosto de 2009, 3:41  

Lloro XD

La clave es, si todas las canciones siguieran la tónica de Blood on my hands (sutil) no saldrías con ganas de matar gente, saldrías con ganas de matarte a tí. O por lo menos de cortarte fuerte XD

That´s the point, sufrir a lot.

About This Blog

Lorem Ipsum

  © Blogger template Sunset by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP