Fuerza

>> miércoles, 19 de agosto de 2009

Realmente hace una noche preciosa...

Es de esas que me recuerdan a ti. Te gustaban tanto las estrellas...

Si las miro por mucho tiempo, siento que si alzo la mano puedo alcanzar a tocarlas. Es agradable.

En determinados momentos, cuando me atrevo a pensar en ello, quiero creer que finalmente conseguiste reservarte un trocito de ese cielo que tanto nos gustaba contemplar, juntos.

Si también pudiera volver a tocarte...

Eso si que procuro no pensarlo.

Sí. Es cierto, te echo de menos, pero, ¿sabes? No estoy triste. No quiero estarlo nunca más. Sé que no te gustaría, y por ti, procuro no estarlo.

Es una promesa.


Supongo que, al fin y al cabo, seguiré luchando.

About This Blog

Lorem Ipsum

  © Blogger template Sunset by Ourblogtemplates.com 2008

Back to TOP