Busco amigos que no sean como yo
>> viernes, 16 de octubre de 2009
L: Es tan mítico como el arco iris de mi nick.
P: Pero si hace tiempo que no lo tienes.
L: Claro que no. Para llegar a mito, antes tiene que morir.
P: ¡Ah!, ¿murió?
L: Ajá.
P: Pensaba que había conocido por fin al icono de la Rosa y se habían fugado juntos de tu cuenta. ---¿Y cómo fue? ¿Después de cinco caídas de messenger le dio una sobredosis?
L: No tío. La tecla de borrar, que necesitaba pasta para una conexión decente y le pegó un tiro cuando se negó a dárselo.
P: Puf, qué mal. Estaría harta de que la aporreases cada vez que te caías, pero de ahí a matar al pobre arco iris...
L: Díselo al enter, que lo vio todo. Desde entonces no me pulsa bien. Creo que se quedó traumatizado.
P: Le comprendo. Yo no soy el mismo desde que mi madre se hartó de ver la mierda amontonada en mi cuarto y acabó limpiando el polvo. Nos habíamos hecho hasta amigos. Ahora lo echo de menos.
L: Pero tío, el polvo no muere; sólo cambia de sitio.
P: ¡¿Quieres decir que todavía sigue vivo?!
L: Sí, en alguna parte. Y estará esperándote.
P: ¡Oh, no! ¡Entonces estará herido! Mi madre lo gaseó con Pronto.
L: Puuuf. Tenemos que encontrarlo antes que los ácaros. En su estado, abusarán de él.
P: No... No puedo soportarlo.
L: Tranquilo, tranquilo. Lo encontraremos. Prueba a ser un guarro otra vez.
P: Hecho.
P: Pero si hace tiempo que no lo tienes.
L: Claro que no. Para llegar a mito, antes tiene que morir.
P: ¡Ah!, ¿murió?
L: Ajá.
P: Pensaba que había conocido por fin al icono de la Rosa y se habían fugado juntos de tu cuenta. ---¿Y cómo fue? ¿Después de cinco caídas de messenger le dio una sobredosis?
L: No tío. La tecla de borrar, que necesitaba pasta para una conexión decente y le pegó un tiro cuando se negó a dárselo.
P: Puf, qué mal. Estaría harta de que la aporreases cada vez que te caías, pero de ahí a matar al pobre arco iris...
L: Díselo al enter, que lo vio todo. Desde entonces no me pulsa bien. Creo que se quedó traumatizado.
P: Le comprendo. Yo no soy el mismo desde que mi madre se hartó de ver la mierda amontonada en mi cuarto y acabó limpiando el polvo. Nos habíamos hecho hasta amigos. Ahora lo echo de menos.
L: Pero tío, el polvo no muere; sólo cambia de sitio.
P: ¡¿Quieres decir que todavía sigue vivo?!
L: Sí, en alguna parte. Y estará esperándote.
P: ¡Oh, no! ¡Entonces estará herido! Mi madre lo gaseó con Pronto.
L: Puuuf. Tenemos que encontrarlo antes que los ácaros. En su estado, abusarán de él.
P: No... No puedo soportarlo.
L: Tranquilo, tranquilo. Lo encontraremos. Prueba a ser un guarro otra vez.
P: Hecho.
0 huellas:
Publicar un comentario